¡Camina descalzo!
Esto es lo más importante para recuperar la función normal del pie, independientemente de si tienes pies planos, pies cavos, juanetes u otras lesiones o deformaciones: ten en cuenta que el 99% de estas lesiones provienen del calzado.
En tu casa debes caminar descalzo SIEMPRE
En lugares exteriores, sin peligros (vidrios, clavos, piedras afiladas, etc…) puedes intentarlo poco a poco.
Y en todas las demás ocasiones, en la calle, en el trabajo, en el deporte) usar zapatos minimalistas (barefoot) que son zapatos anchos, casi sin suela y con la forma del pie.
Elimina de tu vida los zapatos estrechos, son los causantes de tus males
¡Acostúmbrate a caminar descalzo en todas las ocasiones que te sea posible!
